EL RIESGO DE PSEUDOMONA AERUGINOSA EN EL AGUA DE LOS HOSPITALES
14 Noviembre, 2024
Como la Legionella, la bacteria Pseudomona se encuentra de forma natural en lagos y ríos y cuenta con más de 120 especies. La Pseudomona aeruginosa es la más habitual y es responsable de causar infecciones del tracto respiratorio y urinario y en la piel, ojos y oídos.
Al presentar múltiples mecanismos de resistencia a antibióticos, P. aeruginosa puede causar infecciones peligrosas y complicadas de tratar, especialmente en enfermos inmunodeprimidos.
Según el ECDC, en 2020, el 13 % de los pacientes que permanecieron en una unidad de cuidados intensivos (UCI) durante más de dos días presentaron al menos una infección (neumonía, infección del torrente sanguíneo o infección del tracto urinario). En el caso de neumonías, el microorganismo detectado con mayor frecuencia fue Pseudomonas aeruginosa (21,1 %) y para infecciones de orina fue la tercera causa con un 14,3 % de los casos.
El riesgo de la Pseudomona reside en su capacidad de supervivencia porque algunas cepas son capaces de formar biofilms con una alta resistencia a los productos antimicrobianos y desinfectantes.
La Pseudomona no es uno de los parámetros microbiológicos que habitualmente se analiza en las aguas de consumo, pero su presencia cada vez más habitual en las aguas de hospitales han hecho cambiar este criterio, especialmente en las unidades de cuidados intensivos.
Por otro lado, Pseudomonas aeruginosa tiene la capacidad de persistir en puntos húmedos con agua estancada de los centros sanitarios como grifos, filtros, sifones,… y su propagación puede dar lugar a brotes de infecciones nosocomiales.
Un reciente estudio concluye que los sistemas de agua de las UCI representan un riesgo de brotes por Pseudomonas en biofilms, especialmente en aguas estancadas, como los sifones de los lavabos. La sustitución de los sifones en un brote sólo mostró un efecto temporal y finalmente fue necesaria la eliminación definitiva de los lavabos y la atención al paciente sin agua para la contención del brote.
Métodos de análisis de P. aeruginosa en aguas.
Con las nuevas normativas de la Directiva 2020/2184 y el Real Decreto 3/2023 sobre requisitos el agua de consumo se exige el control de P. aeruginosa específicamente en las unidades de cuidados aumentados o intensivos de hospitales
En el caso de hospitales y centros sanitarios, los grifos asistenciales de unidades de cuidados aumentados deberán ser todos muestreados, al menos en cuanto a los parámetros microbiológicos se refiere. Para P. aeruginosa el Real Decreto 3/2023, establece un valor de referencia menor a 1 UFC/100 ml.
Este Real Decreto 3/2023 no ofrece un método específico para el ensayo de Pseudomonas se considera y por ello debería aplicarse la norma de que “En ausencia de un método analítico que cumpla con los criterios mínimos de rendimiento establecidos en la parte D, los laboratorios garantizarán que el análisis se lleve a cabo utilizando las mejores técnicas disponibles que no conlleven costos excesivos”.
Para ello, la Sociedad Española de Sanidad Ambiental (SESA) y la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública y Gestión Sanitaria (SEMPSPGS) han elaborado un documento de consenso para los edificios prioritarios sobre el muestreo, toma de decisiones, seguimiento, actuación y medidas a tomar en el caso de resultados no conformes sobre Pseudomonas aeruginosa.
Textualmente el documento de las Sociedades científicas afirma que para el ensayo de Pseudomonas aeruginosa en laboratorio, se remite la norma UNE-EN ISO 16266-2:2022 (Calidad del agua. Detección y recuento de Pseudomonas aeruginosa. Parte 2: Método del número más probable), aplicable al agua de los hospitales, que establece la metodología de MPN (Most Probable Number) y la validación de Pseudalert® como método de elección por su rapidez en resultados para evaluar el riesgo.
Además, Pseudalert está validado y autorizado en otros Estados Miembros, así que por reconocimiento mutuo y por esta cláusula, es un método valido de ensayo incluido en la UNE-EN ISO 16266:2008. Calidad del agua. Detección y recuento de Pseudomonas aeruginosa. Método por filtración en membrana. Parte 2.
Prevención y control.
El Real Decreto 3/2023 no establece qué medidas control se deben adoptar en caso de contaminación del agua en los hospitales por P.aeruginosa. Dado que es necesario implantar un Plan Sanitario del Agua (PSA) en todos los hospitales con UCI por ser Edificios Prioritarios, será en el PSA donde se deba indicar las medidas se deben adoptar en caso de presencia de Pseudomona en el agua.
Las medidas de control de infecciones pueden consistir en tratamientos de desinfección de choque, la educación del personal sanitario sobre las medidas básicas de higiene, la auditoría de los procedimientos de higiene utilizados en la práctica diaria, evitar el lavabo de pacientes con agua o las medidas de aislamiento de los enfermos infectados.
En un brote, se observó que los aireadores de grifos contaminados en la UCI probablemente sirvieron como una fuente persistente, mientras que la transmisión entre pacientes por parte del personal médico fue una forma probable de propagación.
También se ha utilizado un tratamiento del agua mediante una combinación de peróxido de oxígeno y plata, obteniendo un resultado satisfactorio junto con un plan de mantenimiento y desinfección de los grifos y filtros.
Filtros microbiológicos de agua en puntos terminales.
El Real Decreto 3/2023 exige que en los grifos asistenciales de las UCIs el valor paramétrico para Legionella spp deberá ser “no detectable/L” y para P. aeruginosa inferior a 1 ufc/ ml.
Para conseguir con seguridad esta exigencia, además de las medidas habituales de desinfección y temperaturas adecuadas de prevención en agua sanitaria, seria muy conveniente la instalación de filtros en puntos terminales.
El propio Real Decreto 487/2022 de prevención de Legionela establece que, para instalaciones de usuarios inmunocomprometidos, se recomienda la instalación de filtros microbiológicos de probada eficacia frente a Legionella u otros sistemas de análoga eficacia en los puntos terminales.
Para apoyar esta medida preventiva podemos encontrar algunos estudios que relacionan la instalación de los filtros con la resolución de brotes o reducción de enfermos con infecciones por Pseudomona en UCIs.
No obstante, los filtros de agua de punto de uso, con tecnología de membrana en profundidad actúan como una barrera física reteniendo de forma inmediata aquellas bacterias presentes en el agua. Por ello, se les debe exigir evidencia de no contaminación aguas arriba, es decir del filtro hacia el interior de la tubería.
Descarga el comunicado de la SESA