INGLATERRA PROHIBIRÁ LAS TRAMPAS ADHESIVAS PARA RATAS Y RATONES

27 Abril, 2022
Humane Society International/UK (HSI), organización benéfica de defensa de los derechos de los animales, ha liderado la campaña contra las trampas adhesivas. En 2015, HSI lanzó una campaña para prohibir las trampas adhesivas denominada Unstuck.
 
¿Qué son las trampas adhesivas?
 
Las trampas de pegamento o adhesivas son piezas de cartón, plástico o fibra recubiertos con un fuerte adhesivo que no fragua y están diseñados para inmovilizar a los pequeños animales que pasan por encima de ellos.
 
HSI considera que estas trampas son "inhumanas" e "insostenibles", ya que los animales que quedan atrapados pueden sufrir roturas o dislocaciones de huesos, desgarros de piel, asfixia o, si se dejan el tiempo suficiente, deshidratación e inanición. 
 
Según HSI, algunas otras especies como erizos, pájaros, murciélagos o gatos también han sufrido otras lesiones, algunas mortales.
 
Prohibición de las trampas adhesivas.
 
Las trampas adhesivas están muy extendidas en el Reino Unido, se usan desde 1.920 y muchas de ellas se pueden comprar por tan sólo un euro.
 
La nueva legislación no prohibirá su venta, pero será ilegal que los ciudadanos, incluidos los técnicos de control de plagas, utilicen las utilicen en Inglaterra sin autorización. La prohibición entrará en vigor dos años tras su aprobación.
 
La legislación contiene una exención, que permitirá a quienes trabajen en la gestión de control de plagas solicitando una autorización a las autoridades sanitarias, cuando "no haya otra solución satisfactoria" y cuando sea necesario para "preservar la salud o la seguridad pública".
 
La directora ejecutiva de HSI/UK, Claire Bass espera que la prohibición estimule cambios en las actuaciones de la industria del control de plagas.
 
"Es absolutamente satisfactorio que se prohíba su uso público, y esperamos que esto precipite su retirada de la venta por parte de los minoristas, ya que será ilegal que sus clientes las utilicen", dijo Bass.
 
"El régimen de autorizaciones para el uso de trampas adhesivas por parte de la industria de control de plagas deberá ser muy estricto para garantizar que estos productos ya no se puedan utilizar con impunidad", ha añadido.
 
Una vez que el proyecto de ley obtenga la aprobación real, los ciudadanos o los controladores de plagas deberán tener autorización para colocar una trampa de adhesiva, exponiéndose a una multa y/o hasta 51 semanas de prisión.
 
Por otro lado, descubrir una trampa adhesiva, pero no asegurarse de que está sin efecto también constituirá un delito.