EL CALOR, LA HUMEDAD Y LAS LLUVIAS SE ASOCIAN CON MAYOR INCIDENCIA DE LEGIONELOSIS ESPORÁDICA
24 Octubre, 2022
Algunos estudios sugieren que las condiciones meteorológicas podrían estar relacionadas con el riesgo de padecer la enfermedad del legionario (LD), pero sus resultados no son consistentes.
Aunque los brotes suelen relacionarse con las torres de refrigeración y las redes interiores de agua, los casos esporádicos de LD podrían explicarse parcialmente por los cambios en las condiciones meteorológicas.
Es conocido que la incidencia de la LD presenta una estacionalidad típica y alcanza su punto máximo en los periodos más cálidos, es decir, la temporada de verano-otoño.
Sin embargo, a pesar del creciente número de estudios, sus resultados son aparentemente discordantes y el papel de las variables meteorológicas mencionadas sigue sin estar claro.
Por ello, varios científicos del Instituto de Salud Carlos III, han realizado una revisión sistemática de la literatura científica para investigar la asociación del clima con la LD esporádica y destacar las condiciones meteorológicas clave relacionadas con este resultado.
Conocer las variables meteorológicas que afectan a la aparición de la enfermedad podría mejorar su detección y predicción así como la declaración de la enfermedad.
Se realizaron búsquedas bibliográficas en marzo de 2020 con palabras clave como "legionellosis", "legionnaires' disease", combinadas con "meteorological conditions", "weather", "temperature", "humidity", "rain", "ultraviolet rays", "wind speed", etc.
Los estudios se excluyeron si sólo informaban de casos ocurridos en brotes de LD.
Se encontraron 811 artículos, de los cuales solo 17 se incluyeron en la revisión. Los estudios investigaron diferentes variables meteorológicas y la mayoría de ellos examinaron el efecto combinado de varias variables.
Los factores más examinados fueron la precipitación y la temperatura, seguidos de la humedad relativa.
Algunos estudios plantean que la mayor velocidad del viento, la presión, la visibilidad, la radiación ultravioleta y la mayor duración de la insolación estaban inversamente relacionadas con la aparición de la LD.
La conclusión del estudio es que “en general, la precipitación, la temperatura y la humedad se asociaron positivamente con la aparición de la LD, mientras que hubo evidencias limitadas de que la velocidad del viento, la presión, la visibilidad, la radiación UV y la duración de la insolación están inversamente relacionadas con la enfermedad.”
Como resultado, los investigadores afirman que “un periodo de temperaturas elevadas, pero no muy altas, seguido de un periodo de aumento de las precipitaciones, favorecen la aparición de la LD.”