¿CÓMO REALIZAR LOS CONTROLES DE RATAS EN LOS TECHOS DE LOS LOCALES?

La tendencia a estar en lo alto hace que sea difícil llegar a las ratas en los techos porque se sitúan en techos suspendidos, huecos de paredes altas y en cualquier otro lugar lejos del suelo. Esas ubicaciones no son fáciles de inspeccionar y aún puede ser más difícil aplicar los métodos de control.

 

Por supuesto, la limpieza y la exclusión son importantes. Al reducir la cantidad y el acceso a las fuentes de alimentos, los roedores tienen que trabajar más por menos. Crecen más lentamente, se reproducen con menos frecuencia y tienen una mayor mortalidad en general. 

 

Es fácil decir "limpiar toda la comida" y "sellar todas las aberturas", sin embargo, eso nunca se puede lograr por completo. Siempre habrá algún desperdicio o una abertura que no se detecte o sea inaccesible, pero esto no debe desalentar a esforzarse en seguir arreglando las aberturas y retirar los alimentos. 

 

Todos los seres vivos necesitan lugares con comida, agua y refugio. Muchas veces al eliminar estas zonas, las ratas del techo pueden ser desviadas a otras áreas de comida.

 

Los techos son difíciles de inspeccionar porque son físicamente complicados de acceder. Normalmente, hacen falta escaleras, ascensores, EPIs especiales o encontrar a la única persona que tenga una llave para acceder a estas áreas. Hay menos luz y el acceso es limitado, lo que dificulta la detección de la actividad de las ratas del techo. Colocar trampas y estaciones de cebo a estas áreas requiere más tiempo y esfuerzo que dejar una estación de cebo o algunas trampas por el suelo. 

 

Las estaciones de cebo se pueden colocar por encima en los techos planos. Los techos con desnivel pueden ser más difíciles porque una estación pesada puede deslizarse y caer a través de las baldosas del techo. Al colocar las estaciones, trate de ponerlas en el camino por el que corren las ratas del techo. Por supuesto, esto es especialmente difícil cuando se sitúan sobre vigas, cables u otros conductos. En los techos suspendidos, es posible que deban colocarse más cerca de las paredes en lugar de en las baldosas.

 

 

Peligros. - La mayoría de las etiquetas de rodenticidas indican: "Se deben usar estaciones de cebo a prueba de niños, mascotas, otros mamíferos no objetivo o aves que puedan acceder al cebo". Afortunadamente, no obstante, no habrá muchos niños o mascotas en los techos suspendidos.

 

Monitoreo - Si arrojas un montón de bloques o paquetes de cebo en un techo suspendido, es imposible saber cuánto están comiendo y dónde están comiendo. En cambio, poner cebo en estaciones cerradas significa que se puede realizar un seguimiento del consumo de alimentos, saber dónde se puede concentrar esa alimentación y mover las estaciones según los datos del consumo del raticida.

 

Contaminación - Las etiquetas también suelen indicar: "No coloque cerca o dentro de las aberturas de los conductos de ventilación. No contamine el agua, los alimentos, los piensos, los alimentos o el equipo de manipulación de piensos". Si estás poniendo cebo en un área elevada, hay que mirar siempre que hay debajo de ella. Asegurar el cebo en una estación evita que los roedores lo reubiquen y lo que es peor aún, evita que caiga a áreas de alimentos o a conductos.

 

Sustitución - Cuando se elimine la infestación, se debe eliminar ese cebo. Las etiquetas de rodenticidas dicen: "Reemplace el cebo contaminado o en mal estado inmediatamente". Si se lanza cebo suelto en un techo suspendido, es difícil saber cuáles necesitan ser reemplazados y/o retirados.

 

Las trampas deben seguir las mismas pautas que las estaciones de cebo. Las trampas pueden ser más fáciles de instalar en áreas altas porque son más pequeñas y ligeras. Muchas trampas de presión se pueden atar con bridas o se pueden unir de otra manera a las vigas por las que corren las ratas del techo, alinear en una sección de cable, poner en círculo alrededor de una abertura o distribuir en techos suspendidos. La ubicación es vital para la eficacia de la trampa porque las ratas no se desviarán de su camino para visitar una trampa nueva cuando tengan comida y pistas establecidas en otra dirección. 

 

En la mayoría de los casos, poner una pequeña cantidad de comida u otro atrayente en una trampa anima a las ratas a visitar la trampa, especialmente si se quitan muchas de sus otras fuentes de alimentos. Encontrar qué fuente de alimento es la más atractiva para ellos puede ser un reto. Dado que están usando techos suspendidos como caminos hacia su comida, los trozos de comida más cercanos en las trampas pueden ser tentadores. El inconveniente de usar cualquier tipo de material alimentario es que no durará para siempre. Si permanece en la trampa durante largos períodos de tiempo, se enmohecerá, se endurecerá o no será apetitoso. El alimento viejo necesita ser limpiado y reemplazado.